El Distrito Aeroportuario de Sevilla representa un nuevo paradigma urbano que fusiona tradición aeronáutica e innovación tecnológica en uno de los desarrollos urbanísticos más ambiciosos de Europa. Este macrodesarrollo de 10 millones de metros cuadrados establece las bases para una ciudad híbrida donde conviven vivienda, industria y espacios verdes bajo un modelo de sostenibilidad integral.
La estrategia de EDDEA para el núcleo central Santa Bárbara se fundamenta en la creación de un ecosistema urbano que responde a la demanda contemporánea de proximidad entre residencia y trabajo. El proyecto integra 24.000 viviendas con 800.000 metros cuadrados de uso industrial y logístico, configurando un distrito que consolida a Sevilla como referente aeroespacial europeo.




La propuesta arquitectónica abraza el concepto de ciudad compacta, donde los flujos peatonales cobran protagonismo frente al tráfico rodado. La nueva infraestructura SE-35, reconceptualizada como «SE-Verde», será un gran bulevar con más árboles, carril bici y menos carriles para los vehículos, en el que peatón será el gran protagonista con sendas peatonales y corredores verdes.
El diseño urbano se articula mediante cinco sectores diferenciados que generan una rica diversidad tipológica y funcional. Santa Bárbara, con sus 375 hectáreas, actúa como motor económico del conjunto, mientras que los sectores San Nicolás y Buen Aire complementan la oferta residencial con equipamientos y servicios de proximidad.
La conectividad constituye un aspecto fundamental del proyecto. Las nuevas infraestructuras de transporte público, incluyendo conexiones de transporte público con el aeropuerto, a través del tranvía y la línea 2 de metro, transforman la movilidad urbana y refuerzan la integración del distrito con el tejido metropolitano existente.
El proyecto demuestra especial sensibilidad hacia la inserción paisajística, integrando corredores verdes y espacios de expansión que conectan con el futuro anillo verde de Sevilla. Esta estrategia ambiental no solo mejora la calidad del aire urbano, sino que crea nuevos espacios de socialización y ocio al aire libre para los futuros 50.000 habitantes del distrito.
La dimensión industrial del distrito responde al crecimiento exponencial del sector aeroespacial andaluz, que en 2024 alcanzaron una cifra de negocio récord —2.914 millones de euros (+6,8%) y generaron más de 1.000 nuevos empleos. La proximidad al aeropuerto de San Pablo convierte el distrito en un enclave estratégico para empresas tecnológicas y del sector aeroespacial.
La planificación de usos mixtos garantiza la vitalidad urbana las 24 horas, combinando áreas residenciales de distintas tipologías con centros comerciales, equipamientos educativos y zonas de innovación empresarial. Esta diversidad programática asegura un distrito autosuficiente que reduce desplazamientos y potencia la economía local.
El calendario de ejecución prevé que a final de 2025 empiecen a licitarse las primeras viviendas, estableciendo un desarrollo gradual que permitirá ajustar las estrategias urbanas según las dinámicas reales de ocupación y uso.

