El residencial Casa Forestier, ubicado en uno de los vértices del sevillano barrio de San Bernardo, está compuesto por 87 viviendas plurifamiliares.
El edificio debe su nombre a Jean-Claude Nicolas Forestier, arquitecto y paisajista francés que intervino áreas como el Parque de María Luisa y la Avenida de la Palmera a principios del S.XX, dejando un legado sobre el plano de la ciudad que todavía es evidente hoy.
Desde el comienzo, el proyecto se presenta como una gran oportunidad para EDDEA, pues el terreno que ocupa es uno de los más solicitados de la capital andaluza, por contar con una ubicación privilegiada y disponer de gran proyección y visibilidad en la zona.
La disposición de este residencial de carácter moderno pone en el centro las zonas comunes: está organizada en torno a un jardín interior que forma un bloque residencial y que mantiene el carácter de un patio tradicional del distrito de San Bernardo, pero en una escala mucho menor.
Se perfila así una distribución semejante a la de una casa, más que a la que sería propia de un bloque, que permite vislumbrar la idiosincrasia del enclave: en el borde del centro histórico, cercano a monumentos de interés histórico y artístico y a los pies de las principales estaciones de transporte público.
La visión del equipo tras Casa Forestier es crear un edificio que, basado en su ubicación, forma y cualidades, contribuya al vecindario en muchos niveles y de manera positiva. El objetivo último del proyecto es aportar valor a la zona e inspirar aún más el entorno en el que se ubica, mediante una propuesta de gran calidad a nivel funcional, arquitectónico y estético.
Con el tiempo se puede afirmar que su aparición en esta área de la ciudad contribuye a forjar una nueva identidad en el contexto urbano.
El propósito del proyecto es huir del concepto de bloque residencial en favor de una perspectiva más cercana y propia del barrio en el que se sitúa. Así, nuestro equipo, en colaboración con FAU Arquitectos, plantea espacios para la convivencia entre interior y exterior, entre naturaleza y diseño, desde el comienzo de su ejecución.
Se presenta la propuesta con viviendas plurifamiliares de doble crujía (aquellas que están proyectadas en dos filas y cuya distribución está a la inversa la una con respecto a la otra) y con capacidades que van desde los tres a los cinco dormitorios. Son amplias y admiten personalizaciones tanto en términos de distribución del espacio como en acabados.
Por otro lado, el trasiego y el bullicio de los diferentes puntos del mapa que confluyen en la esquina que ocupa el edificio, se reflejan en su fachada, que se concibió en diferentes alturas para manifestar la transición entre paisajes urbanos muy distintos.
Las facilidades derivadas de su situación hacen aún más atractivo el producto final: en plena área universitaria, en un barrio con historia, a pocos pasos del casco antiguo, cerca de la Plaza de España y el popular Parque de María Luisa y a escasos minutos de las estaciones de metro, cercanías y autobús de El Prado de San Sebastián y San Bernardo (dos emplazamientos de gran relevancia en el callejero de Sevilla).
Fotografías de Fernando Alda.
Contacto
EDDEA Arquitectura y Urbanismo
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