José María de Cárdenas, arquitecto y socio fundador de EDDEA, ha presentado en Cádiz el estudio de viabilidad elaborado por la firma para los terrenos de Navalips, un proyecto urbanístico que se desarrollará en una parcela situada junto a la Zona Franca de la capital gaditana y que, según destaca, “tendrá como ejes principales la identidad, la habitabilidad y la inclusividad”.
Así, esta iniciativa sobre los suelos propiedad de la propia Zona Franca y de la sociedad estatal Sepides contempla la creación de un nuevo núcleo urbano más inclusivo, social y sostenible, en el que habrá cabida para 10.000 metros cuadrados de espacios libres, comercios y se construirán más de 800 viviendas, de las cuales el 50% serán protegidas y el resto de renta libre.
El arquitecto señala que el proyecto contribuirá a la conservación del patrimonio de la ciudad y ofrecerá soluciones habitacionales que mejoren la calidad de vida de los residentes. Para ello, buscará adaptar edificios históricos para crear espacios habitables y funcionales que preserven la esencia del entorno, al tiempo que priorizará la accesibilidad y la adaptabilidad de las viviendas para satisfacer diversas necesidades.
En declaraciones recogidas por Diario de Cádiz, José María de Cárdenas explica que Navalips “es una parte de lo que llamamos la Zona Franca 01, un suelo del Plan General, que a su vez es una pieza más del ambicioso proyecto de Zona Franca de contribuir a la ciudad e ir abriendo lo suelos que ya son obsoletos y que tienen que reciclarse. La ciudad evoluciona con las personas y esta zona no puede ser menos”.
“Ahora tenemos un terreno en el que contamos con una actuación total de 80.000 metros cuadrados de suelo en el que hay una preexistencia, es decir, tenemos un pasado que nosotros hemos querido valorar”, añade.
Identidad
En este sentido, como subraya De Cárdenas, uno de los elementos fundamentales de la estrategia que se va a desarrollar se basa en “hablar de la identidad del sitio”. “En Cádiz eso es fácil y solo hay que trabajar con la red viaria actual y respetar el parcelario, entender que lo que hubo allí de actividad industrial no tiene que perderse ni borrar su huella, sino aprovecharla para rediseñar el nuevo contexto urbano”, añade.
“Sobre esa misma trama, que nos va a facilitar mucho la gestión, hemos pensado que lo siguiente era hablar de habitabilidad”, indica. Por ello, la estrategia de Navalips contempla la transformación de un equipamiento comercial proyectado en la zona y que ha quedado obsoleto, -lo que siempre se llamó como plaza de toros multiusos- en un espacio urbano nuevo verde.
“En línea con las actuaciones de la agenda 2030 y con la necesidad de aumentar la biodiversidad de las ciudades, este suelo comercial se convertirá en un pulmón verde de 8.000 metros cuadrados y que estire la ciudad hasta la nueva frontera de la Zona Franca”, enfatiza el socio fundador de EDDEA.
A juicio del arquitecto, “esto es posible sin perder ninguno de los aprovechamientos y sin perder las funciones para las que el Plan General había previsto este suelo, que es básicamente incluir viviendas. Pero antes hemos trabajado para hacerlo más fluido y transparente y recolectar zonas que, por el parcelario actual, no podían hacerse abriendo ejes transversales”.
Finalmente, otra parte de la estrategia es la de fomentar la inclusividad: “La ciudad tiene que trabajar 24 horas, estar abierta, tener de todo y eso se consigue mezclando usos. Capas de usos terciarios en lugares estratégicos y hemos encontrado plantas bajas donde se pueda tener usos terciarios y sobre ellas las edificaciones residenciales que posibilitarán el desarrollo del plan”.
Todo ello, según afirma, “facilitando la gestión y sin tener que ir a una modificación puntual del plan, sino dentro del vigente”.
