Planteamos el conjunto que forman el intercambiador de transportes, las torres de hotel y oficinas y el centro comercial, asociados a la estación de la Línea 1 del Metro de Sevilla como una revisión del sistema de espacios públicos de Mairena del Aljarafe y de la movilidad en la comarca.
EDDEA proyecta un complejo que va más allá de un intercambiador tradicional. Nuestra propuesta contempla una solución arquitectónica eficiente, integrada en la vida cotidiana de los vecinos de todo el Aljarafe y que actúa como nexo entre la capital y los pueblos de su periferia. La infraestructura está compuesta por el propio intercambiador, dos torres de hotel y oficinas y un centro comercial, todos ellos ligados a la estación cero del metro hispalense.
Cuando abordamos este concurso en 2005, en los proyectos de equipamientos públicos el interés solía centrarse entonces en la producción de objetos autorreferenciales. Para este complejo terciario con intercambiador de transporte, planteamos desplazar el centro de tensión hacia el espacio intermedio que queda atrapado entre ellos, hacia lo público.
Nos interesaba crear un punto de encuentro, un espacio de ocio para el ciudadano, cargado de identidad y personalidad a través de la construcción de un paisaje artificial que lo convirtiera en una nueva área de centralidad de la ciudad de Mairena del Aljarafe.
Planteamos entonces la fragmentación del programa y el desplazamiento del intercambiador a la zona norte de la parcela en planta semisótano, conectándose a este nivel con la estación de metro. Liberar la planta baja de su uso como intercambiador evitando interferencias entre los usuarios del mismo y de los servicios terciarios, mejorando el funcionamiento integral del sistema.
Llevar los taxis y autobuses a la cota del primer sótano puede hacerse sin perder el atractivo de contar con una ventilación e iluminación natural que doten a este equipamiento de un atractivo singular, consiguiendo que la luz sea el verdadero protagonista de este punto de encuentro.
La propuesta se basa en la creación de espacio público, revisando el concepto de plaza y su significado en el tejido urbano de las nuevas ciudades. Para ello, la cubierta del intercambiador servirá de soporte a un parque de uso exclusivamente peatonal que conectará y cohesionará los distintos episodios que suceden en torno a la parcela: construcción del nuevo centro comercial, futuro nuevo ayuntamiento, nuevo equipamiento terciario de la Variante de Mairena y nuevo sistema general de espacios libres.
Los nuevos edificios acotarán y cualificarán dicho espacio, desplegándose al mismo tiempo en él. Se trata de la idea de ‘plaza comercial’ como complemento y alternativa al ‘mall’ americano.
La situación de las torres las dotará de un mayor protagonismo, convirtiéndose en los elementos de mayor carga iconográfica de la operación y modificando el paisaje de la nueva ciudad de Mairena del Aljarafe. Permitiendo que lleguen con mayor claridad al suelo, les otorgamos mayor esbeltez y representatividad.
Las dos torres de hotel y los edificios de oficinas se relacionan a través de un mismo edificio con dos plantas. Esta parte de la construcción ejerce de intermediaria entre las citadas torres y la topografía del parque, generado sobre la cubierta del intercambiador. Una línea poligonal define su perímetro, para enfatizar la verticalidad y, con la ayuda de sombras pronunciadas e igualmente verticales, genera diferentes juegos de reflejos sobre la fachada prefabricada de GRC.
Fotografías de Jesús Granada.
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